El desván



Antes, solía caminar con los pies en el suelo, y ahora voy de puntillas por tu cielo. 
Pero cada promesa de muchas espinas y pocas rosas, me anima a olvidarte. 
El hielo de tu mirada destroza mi alma. 
Y yo, que a ratos me olvido de mí misma, aprendo a dejar en el desván de la muerte tu nombre. 
Entre cajas llenas de apuestas perdidas aprendo a disimular, a no dar la vuelta y regresar. Quisiera volver sobre lo andado, pisando con más fuerza para dejar una huella de mí misma. Una huella que hable de mí y no de tí. 
Una vieja mecedora acuna mi llanto. Una sangría lenta por mí, que no por tí. 
Eres todo tú, una pena que oprime mi pecho, que exprime mi vida y vacía mis sueños. 
Qué difícil es alma mía verte y no tenerte, sigo en primera línea, sufriendo, amando, muriendo, soñando, escribiendo. 
💜💜💜

Me encantaría que formases parte de mi caos. Me sigues?

Twitter @_lasonambula
Instagram @_lasonambula
                    @greta_y_sus_mundos 
Facebook La Sonámbula
YouTube La Sonambula
Pinterest @la_sonambula
Wattpad @LaSonambula

Comentarios

Entradas populares de este blog

Tangata Manu (el hombre pájaro)

Mi querido Stoff

No hay perro que me ladre